viernes, 3 de junio de 2011

PORTAMI VIA

Viernes  3 de Junio del 2011




Una vez más; El cielo desde el cielo (¿Entrega final?)
Con la capacidad de soñar se haya implícita la de volar y viene con la de vivir la necesidad de aterrizar y esta se convierte en una responsabilidad, casi en un deber al no importar cuán alto seamos capaces de llegar en el mundo de los cúmulos, los estratos, los nimbos o incluso, si somos demasiado entregados a nuestras pasiones, al del los cirros. La facultad de idealizar el cielo y alcanzarlo llegando alto viene distribuida en dosis abundantes, generosas y gratuitas en el paquete combo que se nos dio con nuestro cuerpo, nuestra mente, nuestro futuro, y pericias personales de las que cada uno goza en particular medida, pero la posibilidad de llevar nuestros pies tan lejos como nuestra mente puede viajar no se incluyó nunca en el momento del alumbramiento, esa podríamos decir que se vende por separado y usualmente cuesta caro.
Uno de mis pasatiempos favoritos cuando no tengo nada más que hacer ni asuntos más apremiantes en que concentrar mis ideas, es el soñar despierto, lo suelo hacer a menudo cuando recorro distancias a pie y si no hay una preocupación que acallar, o un plan que trazar, me gusta perderme en el paisaje cualquiera que este sea, dejarme caer y tener mis debrayes, idealizar propósitos, deseos, virtudes y a veces incluso personas. Al dedicarle tiempo a este habito yo estoy cierto de estar manteniendo frescas algunas nociones preternaturales de esas que componen la moralidad y que me dicen a menudo que si el mundo es difícil, yo no tengo por qué serlo también.
El aterrizaje es entonces necesario y es lo que hace la diferencia entre el lunático que no logra conciliar mundos y se queda perdido con Dorothy y Alicia en un punto que solo aparece en un inusual mapa, al ladito de la tierra de Oz, no muy lejos del país de las maravillas. No se trata de residir en la Utopía ni de construir una ciudad del sol, A "Nunca jamás" no te acerques y si has estado ahí decídete a entregarte a lo demás, y si por ese lugar de la mancha debes cruzar, de Sancho no dejes de confiar. Se sueña porque los sueños son la potencia que reside en todo lo que aun no es, pero es solo aire intangible si no hay una fuerte tensión que tire del Axis que es por definición propio solo del tiempo verbal del presente y que se desperdicia fácilmente.
El Axis o la acción, es la que verdaderamente da sentido a una vereda y aunque esta se encuentre flanqueada por lo que antes provino de la mente, nunca se podrán comparar.
En mis conclusiones se postula como verdad que el soñador es y siempre será solamente una persona muy interesante, pero fanático a fin de cuentas, nunca cambiara de tema, nunca generara una verdadera opinión y será preso psicológico de sí mismo. El que al despertar decide mover los pies y caminar es el que llegara lejos, no siempre será una persona interesante, pero al menos será eficiente, prospera y mas posiblemente… feliz.
Todo esto viene a colación porque estoy relativamente cómodo en el asiento de un avión, pensando que solo en unas horas volveré a ver a personas que hace tiempo no he tenido frente a mí y ha venido a mi mente que muchos no entenderán que fue lo que hice durante un año y que tampoco entenderán porqué lo volvería a hacer. En su momento sacaran el tema y al primero le explicare con toda la paciencia del mundo, pero es un asunto basto en contenido así que no puedo asegurar que a los que le sigan les sea capaz de prodigar la misma calma.
Lo que hice fue poner en práctica precisamente mi capacidad de despertar y me sentí complacido al verla funcionar a la perfección y si Dios me sigue regalando “mañanas”, lo hare cotidianamente no sin antes dedicarle su tiempo a la fase previa a la vigilia en el ciclo dual que usualmente empalmamos con el rutinario amanecer y anochecer.
Llevo los últimos días viviendo un despertar, despidiéndome de una etapa que reconozco como poco proveedora de promesas de seguridad pero que no se si podre igualar jamás en cuanto a revelaciones de autoconocimiento y a experiencias de confrontación. Lo viví en una soledad que me dejo más de una vez hablando solo y orando mucho. Reafirme como ya he mencionado antes, que hay un proyecto que he elegido y me regodeo en la idea de solo pensar que me hará inmensamente feliz ejecutarlo en plenitud y con entrega total.
Tratare de explicar hoy finalmente uno de los términos de mayor relevancia en la realización del último gran capítulo de mi vida, uno que viene ligado estrechamente a soñar, no es más que una tortura si uno no sabe actuar y es sin duda también la puerta a lo que vendrá;  La Seducción.
Para que entiendas esta palabra del mismo modo en que yo lo hago necesitas antes que nada subir un peldaño en la escala simbólica del vocabulario. A partir de este punto le daremos a cada palabra un valor un poco superior al usual, esto es algo que quizá hayas hecho ya más de una vez al leerme para poder llevarme el paso, esta vez hago mención previa porque es imprescindible.
Nos alienta por costumbre el deseo, nos motiva comúnmente el anhelo y nos hace medir las fuerzas la posibilidad pero es la seducción la que nos moverá. Casi todo lo que hacemos (y en otro momento hemos de ver que tan indispensable es ese “casi”) se debe a un propósito de confort, las cosas que realizamos por deber hayan su motivo fundante en una consecuencia de la que son causa.
Nos dinamizamos en busca de los que consideramos elementos esenciales en nuestra odisea hacía la felicidad, incluso los detalles son parte de esa búsqueda y a esos detalles les llamaremos “capricho”. Son como al empacar, quizá no son lo más importante, pero sirven para llenar los huequitos y aprovechar todo el espacio. El problema viene cuando sobrevaloramos o devaluamos erróneamente y causamos un desequilibrio del que puede ser común desenlace el sobrepeso en la maleta, eso o llegar a un destino con menos cosas de las que necesitaremos… y a eso le llamaremos solamente “estar en un aprieto”.
Dejamos pues que elementos profundos como ideologías, logros, metas, moral, fe, etc. Amueblen el hogar interno, dejamos que sean los caprichos los que decoran el lugar pero eso puede ser poco serio y algo endeble si no nos vamos antes a la consideración de un aspecto crucial; el recinto en sí mismo.
Donde decidamos construir será decisivo para nuestra vida, los materiales de los que este hecha la vivienda sarán soporte y la sabia elección de la ubicación tendrá como consecuencia que disfrutemos del ambiente del que nos vamos rodeando. En otras palabras, mi vocación y la dedicación a la misma.
¡Voila!  ¿Quién soy y quién quiero ser? Esa es la base de la seducción, y cuando me entero, elaboro o percibo la existencia de algo que me invita a visualizar un futuro en el que soy lo que he decidido, lo tomo, me aferro y jamás lo suelto… hay tres cosas que pueden seducir a un humano si este se expone a ellas; Dios, el oficio, y aquella (aquel) con quien se pasa el resto de la vida.
Cuando me preguntes el siguiente paso en mi aventura, no lo hagas esperando encontrar sensatez en mis palabras porque el simple hecho de que tengamos concepciones diferentes del mundo hará que posiblemente no te complazcan y no busco complacerte. Pregúntamelo con un genuino y cariñoso interés, con curiosidad si prefieres y entonces tendremos una gran charla.
No busco que este episodio sea largo,  busco que tenga contenido y creo que he dicho lo que se tenía que decir, cualquier otra cosa que quieras saber de mi puedes preguntármela cuando quieras, tengo buenas anécdotas, un par de nuevos chistes y muchas ganas de darte un fuerte abrazo de esos que alguien alguna vez me dijo que solían extrañar de mi.
Nos vemos pronto, mas pronto de lo que aun puedo creerlo y aun así cuídate hasta entonces y únete a mi oración hecha vida, únete a mi búsqueda de santidad en lo mundano, de fortaleza en lo humano, de belleza en lo terreno y de prosperidad en lo futuro y clama fuertemente a mi lado “PORTAMI VIA”
Podemos atrevernos a ser Quijotes rotos
Y luchar quizá en campos inconcebibles y maravillosos
Podemos poner la fe en lo que es de verdad
Pero que al mundo se le hace fácil de lado dejar.
Monta al rocín y espoléalo fuerte
Busca un fiel Sancho y sele paciente
A Dulcinea estúdiala con calma
Y si aun a Aldonsa amas entrégale tu alma
Estate atento a la llegada de tus rivales
Y vence gigantes y hechiceros rufianes
Si eran solo molinos, pide perdón
Si el mago era un posadero, con más razón
Queden como amigos,  Retribuye lo dañado
Deja un buen recuerdo, siempre todo pagado
 Sonríele al caballero que llegara por ti
Quizá sea momento de finalmente partir.
Regresa a casa donde con amor te esperan
Pero no tires la armadura
…podrías volverla a necesitar

Desde un lugar de la Mancha...
Portami Via Z